Torta de aceite veleña

Otras de las delicias malagueñas son las tortas de aceite y esta semana probamos hacerla por primera vez en casa (quedó mejor de lo que se ve en la foto y de sabor A1). Están hechas con azúcar, canela, harina, almendras, levadura y aceite de oliva virgen extra. Se trata de una de las tortas más populares de la provincia de Málaga, original de Algarrobo (de ahí que se conozcan como tortas de Algarrobo) aunque la receta se remonta a la época árabe y la repostería malagueña la ha evolucionado y mejorado hasta hacerla suya. Con el tiempo, en cada localidad de la provincia se le ha dado un toque personal, pasando a tener diferentes nombres. La que hicimos en casa se le llama veleña (por ser típica de Vélez-Málaga, allí las hacen más esponjosas). Durante siglos las tortas de aceite fueron dulces reservados para las ocasiones especiales, (celebraciones y fiestas) cuya receta tradicional pasaba de una generación a otra. Hasta bien avanzada la segunda mitad del siglo pasado, era tradicional que cada familia elaborara su propia receta. Preparaban la masa para esas ocasiones especiales y las llevaban a las panaderías para que las cocieran en sus hornos, cuando estos ya habían acabado la elaboración del pan. Con el tiempo se ha convertido en un dulce de consumo diario que todos los malagueños (y los que no lo somos) hemos probado alguna vez para desayunar o merendar, mojada en leche, café o chocolate.

Templos de Málaga

Aunque la Iglesia Nuestra Señora de la Encarnación es el templo católico más grande de la provincia de Málaga y la única con el distintivo de catedral, existen otras iglesias del interior que bien podrían competir en tamaño y majestuosidad. Cuatro de ellas son:

-La iglesia de San Antonio de Padua en Alpandeire. Construida a mitad del siglo XVI y restaurada en el siglo XVIII, sus grandes dimensiones han hecho que se le conozca como la "Catedral de la Serranía".

-La Iglesia Nuestra Señora de la Encarnación en Álora es la segunda iglesia más grande de Málaga después de la Catedral. Se empezó a construir en 1500, sobre los cimientos de una antigua mezquita, y se terminó en 1699.

-La Iglesia del Espíritu Santo en Ronda fue erigida por los Reyes Católicos sobre la mezquita que había en el Arrabal Alto. Se consagró bajo la advocación del Sancti Spiritus en conmemoración del día en que fue tomada la ciudad. El edificio se construyó entre finales del siglo XV y principios del XVI.

-La iglesia San Jacinto en Macharaviaya es la primera construcción religiosa de la localidad que data de 1505. De grandes dimensiones, el templo está situado en el punto más elevado del pueblo y se ha convertido en referencia visual y de atracción turística. Bajo la iglesia se encuentra la cripta-panteón de los Gálvez (familia influyente en su época que desempeñó un papel fundamental en la historia no solo de Macharaviaya sino también de España y América).

Castillo de Teba

 

Dominando el curso del río Guadalteba y su campiña, se alza sobre una colina el Castillo de la Estrella (Hisn Atiba, su nombre en árabe), a cuyos pies se construyó la Villa de Teba. Nazaríes y cristianos combatieron por sus muros. Desde que se edificó a finales del siglo XII, el Castillo de Teba ha sido una pieza clave en el desarrollo de las civilizaciones de la comarca Guadalteba y toda la provincia de Málaga. Se trata de una de las fortalezas militares más grandes (la segunda detrás del Castillo de Bentomiz en la localidad de Arenas) y mejor conservadas de Andalucía, ya que está prácticamente virgen y se mantiene sin intervenciones ni reformas posteriores a las hechas por los pueblos que lo habitaron. El conjunto dispone de tres puertas, la principal orientada al oeste, hacia Ronda, y las otras dos, más pequeñas, orientadas al norte y noreste. Sus murallas pertenecen a la época almohade (siglos XII- XIII), aunque la llamada Torre del Homenaje y los restos de la primitiva iglesia de su interior son de época cristiana. Es visitable y en el centro de visitantes se cuenta toda su historia de guerras y conquistas. Hoy es noticia porque ha pasado a formar parte de la red de Grandes Castillos y Palacios Turísticos de España, una asociación que quiere impulsar el turismo cultural reuniendo en una misma red a los castillos y palacios más importantes de España.

Cartajima pueblo blanco malagueño

Cartajima es uno de los pueblos blancos malagueños situado en la Serranía de Ronda a 140 kms. de Málaga capital. Me han dicho que se ven unos atardeceres espectaculares, como el de la primera foto y que su pasado morisco se nota en sus calles sinuosas y sus casas bajas encaladas que se entremezclan con la arquitectura castellana. El nombre del pueblo proviene de la palabra árabe "Al-Z'jaima" que significa el lugar de la altura y que al castellanizarse pasó a su nombre actual. Visitas obligadas en Cartajima son: la iglesia de Nuestra Señora del Rosario un edificio construido en el siglo XVI, situado en la zona más alta del municipio, frente al Ayuntamiento; los yacimientos arqueológicos romanos donde se conservan restos de las termas de la Cañada del Harife y la necrópolis del Cortijo del Ratón; el castillo de época medieval y los antiguos poblados de Casapalma y Cartabón.

 

Mención aparte la Fuente de los Peces de época andalusí, ubicada en el camino de Arroyo Blanco y que cuenta con elementos arquitectónicos y decorativos de origen morisco. Se trata de una fuente de origen morisco que aún conserva las almenas de la obra original, a pesar del deterioro sufrido por los años. El agua se almacena en un aljibe abovedado que vierte a la fuente y al abrevadero situado a la izquierda. Además de constituir una infraestructura básica para la provisión doméstica de agua, la fuente también se usaba para el abastecimiento pecuario, como indica el abrevadero, y también agrícola, ya que regaba un pequeño huerto situado en las inmediaciones de la fuente. El nombre se debe a que, en épocas recientes, hubo peces en la pileta de agua. También los riscos son formaciones naturales de gran importancia y que se han convertido en un lugar ideal para hacer senderismo.

Málaga a través del periodismo gráfico

 

Málaga en el S. XXI es otra exposición que presenta el Ateneo de Málaga. Con el lema "Somos los ojos de lo que ocurre en Málaga", la Asociación Malagueña de Informadores Gráficos de Prensa, exhibe una serie de fotografías que han ilustrado portadas de periódicos, aunque algunas de ellas han sido informaciones fugaces de un fin de semana. Treinta imágenes que son periodismo en estado puro y que podrán verse hasta el 16 de octubre.

Patrimonio gráfico malagueño

"Málaga Patterns, una identidad visual para la ciudad’, es un proyecto expositivo que recoge el trabajo del diseñador Nielo Muñoz, quien pone en valor el patrimonio gráfico malagueño, mediante la muestra de algunos de los elementos -en forma de ‘patterns’- más identitarios de la ciudad. El autor reúne, mediante la búsqueda y la observación del entorno urbano, una colección de murales, pavimentos y elementos ornamentales tales como zócalos, vidrieras y rejerías localizadas en distintas calles y edificios emblemáticos de la ciudad de Málaga (como por ejemplo, la fachada de la Iglesia de San Juan o la cubierta del Mercado de Atarazanas o los azulejos de un portal de la calle Victoria o el pavimento de la Alcazaba, entre muchos otros) cuyo patrón fotografía, aísla y dibuja mediante ilustración digital. Se presenta en el Ateneo de Málaga hasta el 27 de noviembre, bajo el patrocinio de la Fundación Málaga. El proyecto lo completa la edición de un libro gráfico.

Libro sobre la historia del Hospital Noble

Comparto la portada del último trabajo del escritor malagueño Antonio González Villena: “Historia del Hospital Noble. 150 años de una institución malagueña creada por una familia inglesa". Cuenta al detalle los motivos que impulsaron a una familia inglesa a construir en Málaga un hospital de beneficencia. Recomiendo su lectura porque, aún cuando no es una novela, el trabajo de investigación que ha realizado su autor da para hacer ficción basado en hechos reales, además de ser concienzudo e interesante. El prólogo lo escribió otro autor malagueño, Patrick Tuite Briale, del que meses atrás recomendé la lectura de dos de sus novelas: Sucedió en Málaga y Sucedió en Málaga.