Microcuentos 5

Préstame tus alas para enseñarte que el infinito es un lugar donde podemos volar.

Me veo frente al espejo y descubro arrugas y expresiones que me aterrorizan y me hacen pensar que el tiempo pasa más rápido de lo que realmente me gustaría.

Soñar es de valientes...atrévete a soñar.

Me gustaría hacerle llegar estas palabras, no lo sé, quizás con el tiempo me atreveré a enviárselas o, tal vez, lo haga cuando no me queden más esperanzas de volver a verle.

A medida que pasaba el día y hablábamos de cosas personales, y especialmente en el momento en que le confesé lo que sentí en el pasado, el suelo me elevaba cada vez más, flotaba en las nubes, un hormigueo incesante recorría mi estómago, me sentí un adolescente y fue bonito.

Fuiste mi amor platónico, pero la distancia, el poco roce entre nosotros y la falta de comunicación durante mucho tiempo, menguó en mí ese sentimiento.