Ayer leí varias publicaciones comentando que se había dicho que a los animales de compañía que sacamos a la calle para sus paseos habituales, había luego que limpiarles las patas. Eso es correcto, pero lo que me preocupó es que algunos dijeron que había que hacerlo con una solución de agua y lejía o gel antibacterial. Craso error y más que error es una perfecta bestialidad. Con mi Brody, desde que comencé a pasearlo hace doce años, siempre he usado las toallitas que se usan para limpiar a los bebés, porque él acostumbra a subirse al sofá y a las camas y de vez en cuando duerme conmigo. Por lo tanto, en ese sentido no he tenido problemas porque la compra de esas toallitas está dentro de mí presupuesto familiar. Pero aquellas personas, que por las razones que sean, no voy a entrar a valorar eso, no los limpian después de un paseo y no tienen toallitas de bebé, un trapo mojado en agua con un poco de jabón está bien. Además de las patas y sus partes íntimas, también se le debe pasar por el cuerpo para limpiar su pelaje. Ya saben, lo que está tachado en rojo en la foto NO LO USEN, usen sólo lo que ven marcado en verde. Y después de limpiarlos, una galletita de recompensa no les vendría mal. Sus mascotas se lo agradecerán y no les harán ningún daño que pudiera ser irreversible.
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