Para este fin de semana he subido el listón de la repostería y me he atrevido con un Bienmesabe al estilo venezolano. Descubrí que, aunque este postre es un dulce típico de muchas localidades españolas y países hispanoamericanos (entre ellos Venezuela), la versión más antigua que se ha encontrado de su elaboración es la que preparaban en el Convento de Clausura de Belén de las Monjas Clarisas de la ciudad malagueña de Antequera y que data de 1635. Por lo que, es muy probable, este postre tenga orígenes árabes. El bienmesabe antequerano se hacía (y se sigue haciendo) con almendras, jarabe de frutas y cabello de ángel. Este postre llegó a Venezuela de la mano de los pobladores españoles (o conquistadores como quieran llamarlos) que enseñaron a prepararlo a los esclavos nativos y a los africanos que servían en sus haciendas. El bienmesabe venezolano, tal como lo conocemos hoy, apareció mucho más tarde cuando las monjas franciscanas de El Paraíso, en Caracas, reemplazaron las almendras por la pulpa de coco y la leche, para darle así un sabor más tropical. Con el tiempo, la cocina popular se encargó de bañar al bizcocho con ron, brandy o jerez. Aunque el bizcocho no me quedó todo lo esponjoso que hubiera querido, para haber sido la primera vez que lo preparo creo que merezco un aprobado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario