Miren lo que descubrí hoy en
el Carrefour, cuando los vi me transporté inmediatamente a mi adolescencia
cuando los compraba en la cantina del colegio Las Acacias. El último recuerdo
que tengo de haberlos comido fue un día que iba de Campo Alegre a Chacaito a
esperar el carrito para ir a Santa Mónica y de eso hace ya más de 30 años. No
dudé en comprarlos aunque pensé que era una casualidad el nombre y la forma del
producto, pero al destaparlo vi que son idénticos y saben igual a como los
recuerdo. Sorpresas que a veces te da la vida, aunque quizás se haga menos
sorpresa con tantos venezolanos emigrando fuera de Venezuela, ya hay una
cantidad de productos venezolanos que se venden en muchos países. Cruzo los
dedos para que alguien traiga el chocolate de leche Savoy a Málaga (sé que los
venden en Madrid, pero aquí que yo sepa aún no han llegado).
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