Hoy hablaré de una de las
joyas de la corona de Málaga: su Catedral. La historia de la Catedral está
íntimamente relacionada con la mezquita Mayor sobre la cual fue construida,
entre 1528 y 1782, englobando actualmente el edificio del Sagrario, lienzos de
la primitiva mezquita y encontrándose también trazos en la galería que une el
Sagrario con la Catedral, precisamente en el lugar en que se encuentra hoy día
el museo catedralicio. Al conquistar los cristianos la ciudad, los Reyes
consagraron la mezquita Mayor como iglesia. A esta mezquita le dieron el nombre
de Santa María de la Encarnación, título que daba siempre la reina a la iglesia
Mayor. Al principio se utilizó la iglesia tal como estaba, pero en 1528
comenzaron las obras de construcción de la nueva catedral. Estas obras
finalizaron en 1587 y el templo fue
dedicado el 31 de agosto de 1588. La catedral está llena de anécdotas, una de
ellas es referente a la torre que no llegó a terminarse (de allí el apodo de la
Manquita con el que los malagueños identifican a su catedral). La tradición dice
que el dinero destinado a terminar esta torre fue enviado a América para ayudar
en la Guerra de Independencia. La otra torre se terminó en 1769 y tiene una
placa en la que se lee: "Esta torre se acabó el día tres de agosto del año
mil setecientos sesenta y nueve, y tiene de alto desde la superficie de la
calle hasta la “extremedad” del arpón ciento diez varas y media
castellanas".
Portada Principal
Sobre este frontal lucen
solemnes las tres puertas de entrada a las que se accede por una gran
escalinata de mármol. Sobre la puerta principal se halla tallado un altorrelieve en
forma de medallón con el misterio de la Encarnación del Verbo, mientras que
sobre las otras dos puertas están los relieves de San Ciriaco y Santa Paula,
patronos de la ciudad. El portal central se abre en pocas ocasiones y sólo cuando
hay actos litúrgicos en donde asisten los Reyes de España y altos dignatarios.
En el año 2004 parte de la Catedral (y principalmente esta fachada) fue cedida
para la filmación de la película El Puente de San Luis Rey.
Las capillas de la Catedral
Las catedrales,
independientemente del sentimiento religioso que profesa cada quien, rezuma en
su interior todo un movimiento artístico convertido en objetos de culto:
cuadros, retablos, esculturas, mobiliario, todo se suma a ese arte sacro que
forma parte del patrimonio cultural de una ciudad. Importantes artistas de la
época han colaborado o, incluso, han desarrollado sus carreras basándose en este
movimiento dedicado a lo sagrado. Dentro de la Catedral de Málaga existen trece
capillas, cada una consagrada a un santo o santa o a una virgen. Al echar un
vistazo una a una se ven diferentes estilos y la decoración también varía, unas
son más recargadas que otras (supongo que tendrá que ver con la época en la que
se habilitó ese espacio para abrir una capilla). En todas hay obras de gran
interés artístico y sepulcros de antiguos arzobispos. La primera capilla que se
adornó fue la Capilla del Cristo del Amparo y la Capilla Mayor desde donde se
ofician las misas representa el Templo de Salomón, personalmente la capilla que más me impresionó fue la del Sagrado Corazón. Como sería muy largo
describir una a una, lo mejor es venir y contemplarlas como si se tratase de un museo porque en todas ellas hay obras de arte que han trascendido al tiempo.
La sillería del Coro
En 2011 se inscribió la
Sillería del Coro de la Catedral de Málaga en el Catálogo General del
Patrimonio Histórico Andaluz, como Bien de Interés Cultural. Este conjunto
escultórico del siglo XVII iniciado en 1633, se encargó originalmente al
artista sevillano Luis Ortiz de Vargas, quien realizó la estructura básica en
madera. Pero fue Pedro de Mena el que culminó la obra, imprimiendo a cada una
de las esculturas una honda expresión religiosa, llena de serenidad y
gesticulación contenida. La sillería, tallada sobre madera de cedro, caoba y granadillo,
presenta una traza rectangular dispuesta en tres niveles, los dos primeros
destinados a asientos y el último como ático. El conjunto está presidido por el
sitial episcopal, antecedido de escalinatas y barandillas protectoras. El
primer cuerpo, formado por 44 asientos, se caracteriza por su tallado en la
parte inferior y lateral con diversos motivos geométricos, vegetales, animales
y alegóricos, así como cabezas masculinas y femeninas. El segundo cuerpo,
también con 44 asientos, presenta como única diferencia los respaldos decorados
a base de tableros de grandes dimensiones en los que se ubican las esculturas
que representan a San Pedro y San Pablo, el apostolado y la Virgen y los padres
de la Iglesia, santos y evangelistas. Finalmente, el tercer cuerpo,
correspondiente al ático, está compuesto por cabezas femeninas enmarcadas por
molduras rematadas con cresterías. Junto con la sillería, el Coro de la
Catedral de Málaga se completa con otras piezas entre las que destaca el atril
de estilo manierista, fechado entre 1645 y 1671.
Cubierta de la Catedral
En mayo de 2015, se abrió al público el acceso a las cubiertas de la Catedral de Málaga con una visita guiada de aproximadamente una hora en la que, además de ver una panorámica de la ciudad, explican la historia de la Catedral. La visita a la cubierta se hace por la torre norte, subiendo por unas estrechas escaleras de caracol de unos doscientos escalones que se suben por tramos, en el primero llegas a una terraza y allí los guías te hablan de la Catedral y en el segundo ya sales al techo exterior para ver la ciudad. Mucha gente recomienda ir cuando el sol se pone para ver el atardecer. La entrada cuesta 6 euros y hay tarifa reducida para los residentes de Málaga, jubilados, discapacitados y estudiantes menores de 25 años.
La Puerta del Perdón o Iglesia del Sagrario
La Iglesia Santa María del
Sagrario es un templo católico levantado entre los siglos XV y XVIII. Ubicada
en el centro histórico, fue una de de las cuatro parroquias erigidas por los
Reyes después de la conquista de los territorios ocupado por los moriscos
(junto con la Iglesia de San Juan, la Iglesia de Santiago y la Iglesia de los
Santos Mártires, de todas he hablado en anteriores publicaciones), y hoy día
forma parte de la Catedral de Málaga. De este edificio destacan su portada y su
retablo. El origen de la Puerta del Perdón data de 1498, aunque sin la
monumentalidad que adquirió posteriormente, pues en un principio sería un
simple vano. De estilo gótico, se divide en tres arcos de medio punto y su
iconografía expresa los ideales religiosos de un sector de la iglesia
partidarios de la ortodoxia y el centralismo romano. El retablo plateresco de
1944, contiene figuras de los apóstoles, la Virgen Coronada, la Piedad, el
Calvario y el Padre eterno repartidos en compartimento cuadrados, todo con un
brillante y homogéneo color oro. Al iniciarse las obras de la Catedral, la
iglesia pasó a formar parte de la misma y hoy día se usa para bodas, bautizos y
comuniones, pero no se ofician misas.
El Patio de los Naranjos
Solo hay Patio de los
Naranjos en Andalucía yde todos ellos el más excepcional es, sin duda alguna,
el de Málaga, ya que aunque existen otros en otras ciudades andaluzas, como el
de Córdoba, el patio malagueño es el único documentado de la historia. En la
enciclopedia de viajes del alto dignatario de El Cairo Al-Umarí publicada en
1337, se habla de él, «La Mezquita Mayor es magnífica. En el patio hay
plantados naranjos». Pero nadie ensalza mejor ese patio que el gran viajero Ibn
Battuta, «Su Mezquita tiene una amplitud enorme y es famosa por su baraca. No
hay patio semejante al de esta Mezquita con naranjos inmensos». Así que, cuando
paseen por los alrededores de la Catedral de Málaga, párense un momento a
contemplar el Patio de los Naranjos, el primero de la historia del que el mundo
habló.
Museo Catedralicio
El Museo Catedralicio está
ubicado en la antigua sala capitular y ocupa dos salas recubiertas con un
artesonado mudéjar del siglo XVI. Alberga una selección de su patrimonio
pictórico y escultórico, con relevantes obras de Pedro de Mena y José Ribera
entre otros. La colección se completa con objetos litúrgicos de platería, talla
y bordado, destacando custodias, relicarios, juegos de altar y crucificados
de marfil. La
visita se realiza
conjuntamente con la
de la Catedral.